¿Te resulta familiar? Te miras al espejo por la mañana y, de repente, te ves un nuevo granito en la cara. Y cómo no, en alguna zona a la vista como la punta de la nariz o en medio de la frente. La pregunta es cómo nos deshacemos de él, no en 10 días, sino lo antes posible. La Dra. Katharina Medek te explica por qué se crean los granos, cómo tratarlos y qué hacer para prevenirlos.
Si tienes un problema repentino en la piel y no puedes esperar a una cita con el médico, o si quieres prevenirlos, sigue estos consejos:
Cuidado con las tendencias sobre cuidado de la piel de las redes sociales:
Hoy en día, las redes sociales como TikTok e Instagram siempre presentan una nueva fórmula secreta para tratar la piel con imperfecciones: parches de clorofila, Skin Icing, Skin Gritting, pomada de zinc durante la noche, pasta dentífrica, zumo de limón, parches, máscaras y tiras. Sin embargo, hay que tener mucho cuidado al tomar medidas que no sean de profesionales sanitarios, ya que pueden tener efectos secundarios, y a menudo tienen el efecto contrario y dañan la piel. Por ello, es recomendable acudir al dermatólogo si tienes manchas en la piel, desde el primer momento y no solo cuando aparecen granos grandes y profundos, ya que pueden dar lugar a cicatrices.
La pregunta sobre por qué aparecen imperfecciones no se puede responder rápidamente, ya que las impurezas surgen de una compleja interacción entre varios factores. Además de la predisposición familiar, los cambios hormonales, las enfermedades como el síndrome de ovario poliquístico (PCO) y los efectos secundarios de los medicamentos, el estilo de vida (tabaco, estrés, alcohol...), la dieta (azúcar industrial, aditivos alimentarios, sobrepeso...) y la contaminación ambiental (exceso de radiación solar, contaminación atmosférica...) son factores importantes en la aparición de manchas en la piel.
Además, hay informes que indican que la carencia de vitamina D puede estar relacionada con las imperfecciones de la piel o el acné. El cuidado excesivo o el uso de productos de cuidado inadecuados, así como el cuidado insuficiente de la piel, también pueden allanar el camino para la aparición de manchas. Por lo tanto, es importante determinar las causas en una conversación detallada para encontrar una terapia y una rutina de cuidado de la piel adecuadas.
Se ha demostrado científicamente que la dieta a través de varios marcadores bioquímicos tiene un efecto en la función de las glándulas sebáceas y en la proliferación de bacterias que promueven la progresión de la inflamación en el acné. Las hormonas y los factores de crecimiento presentes en la leche pueden empeorar la piel si se consume demasiado. Esto es especialmente frecuente en los deportistas que consumen habitualmente proteínas lácteas o batidos de proteínas de suero de la leche.
También se ha descrito una relación entre los niveles de azúcar en sangre y el acné, por lo que se recomienda evitar los azúcares industriales y reducir los carbohidratos simples.
Los resultados de los estudios también indican una mejora de la apariencia de la piel mediante el uso de probióticos. Al modular el microbioma de la piel y los intestinos, se dice que alivian la inflamación, reducen los granos y las rojeces y mejoran los niveles de hidratación de la piel, según la aplicación.Sin embargo, se necesitan más observaciones científicas y estudios para confirmar los efectos.
Los ácidos grasos, las verduras y la fruta tienden a ser protectores, así que añade los siguientes alimentos a tu lista de la compra, ya que pueden tener un efecto positivo en el proceso inflamatorio: pescado, aceites comestibles como: aceite de colza, aceite de linaza, aceite de nuez y plantas, frutos secos y semillas, como: semillas de chía, semillas de lino, almendras, aguacate y mucho más.
Las niñas traen los granos y los niños el brillo, ¿es así? Según varios blogs de mamás, experiencias y opiniones populares, se puede ver el sexo del bebé en la piel de la embarazada. Mientras que se dice que las niñas crean imperfecciones en la piel en las futuras mamás y hacen que el pelo esté más quebradizo, las mamás de los niños se libran de esto. Esa es la creencia popular.
La verdad es que más del 90 % de las mujeres sufren cambios complejos en la piel debido al cambio hormonal durante o después del embarazo. Además de estrías, decoloración y sequedad de la piel, los granos y las impurezas pueden afectar al brillo de la embarazada.
El aumento de la producción de hormonas sexuales masculinas (andrógenos) provoca la sobreproducción de sebo y el ciclo descrito anteriormente sigue su curso.
Los problemas cutáneos graves en la adolescencia pueden ser un factor de riesgo para la aparición de acné durante el embarazo. Sin embargo, aquí tampoco hay un hilo conductor: para algunas mujeres, el acné incluso desaparece durante el embarazo, para otras empeora. Además, la incidencia puede variar de un embarazo a otro. La mayoría de las veces, se reduce a medida que el cuerpo femenino se adapta al cambio hormonal.
El crecimiento justo antes del parto se debe a un nuevo cambio en el equilibrio hormonal. Por cierto, incluso la interrupción de la píldora puede desencadenar la aparición de imperfecciones en la piel, motivo por el que muchas pacientes acuden a mi consulta. En el pasado, la píldora se prescribía muy a menudo para la piel con imperfecciones, pero hoy en día esto solo ocurre en determinadas situaciones, ya que ahora disponemos de terapias no hormonales muy eficaces contra el acné.
Mientras que un grano o una pequeña imperfección son molestos pero no suponen realmente un problema, el acné es una afección cutánea grave y muy común que tiene un impacto significativo en la autoestima, la salud mental y, por tanto, también en la calidad de vida de las personas afectadas. Millones de personas de todo el mundo sufren dermatosis inflamatoria crónica. Por lo general, el acné suele evolucionar por fases. Los dermatólogos estamos tan familiarizados con los procesos crónicos como con las nuevas apariciones debidas a cambios hormonales o a la vejez. En este caso, siempre recomiendo consultar con un especialista.
Conclusión: A pesar de los consejos para las imperfecciones repentinas y las posibles causas, es recomendable que consultes a un profesional del cuidado de la piel. Los especialistas analizan la piel y el tipo de acné, comentan las medidas anteriores y elaboran un plan de tratamiento individual y una rutina de cuidado de la piel. Esto incluye desde una terapia local con cremas, tinturas y sueros, hasta exfoliaciones y otros procedimientos como las punciones médicas, hasta un tratamiento sistémico con comprimidos o micronutrientes.
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