Déficit de selenio: síntomas, causas y remedios

Una deficiencia de selenio es la carencia de selenio en nuestro organismo. Este oligoelemento esencial se considera un componente clave de las denominadas selenoproteínas, estructuras proteicas complejas que a menudo actúan como mediadores de reacciones químicas (enzimas) dentro de nuestro cuerpo. La deficiencia de selenio produce una disminución de la función de las enzimas dependientes del selenio. En particular, la esencial glutatioperoxidasa, que ya no puede hacer su trabajo de forma eficaz.

En muchas partes de Europa, los suelos y, por lo tanto, las plantas que crecen en ellos, son bajos en selenio. El cambio climático trae consigo unas condiciones climáticas extremas que empeoran esta situación. Por lo tanto, las verduras, las legumbres y los cereales que crecen en regiones con bajo contenido en selenio solo contienen pequeñas cantidades de este oligoelemento. Por este motivo, el pienso animal en la UE está enriquecido con selenio desde hace muchos años.

Mientras que los omnívoros se benefician de este enriquecimiento, con los vegetarianos sucede lo contrario. Por este motivo, los veganos y vegetarianos tienen más riesgo de sufrir una carencia de selenio. Los enfermos renales, las personas con trastornos alimentarios (anorexia o bulimia) y con trastornos metabólicos genéticos relacionados con el selenio o enfermedades que afectan a la absorción de nutrientes en el intestino (p. ej., diarrea crónica, enfermedad de Crohn) también se encuentran entre los grupos de riesgo.

El selenio es un oligoelemento vital que se utiliza en muchos lugares de nuestro cuerpo. En consecuencia, su carencia puede manifestarse de varias formas. Los principales síntomas de la deficiencia de selenio incluyen:

A la larga, una deficiencia de selenio puede tener consecuencias graves. Por ejemplo, la enfermedad de Keshan causa una enfermedad del músculo cardiaco. La enfermedad de Kashin-Beck presenta una disminución del crecimiento óseo y cambios en las articulaciones. Ambas enfermedades específicas del déficit de selenio se producen casi exclusivamente en ciertas áreas de China afectadas por suelos extremadamente bajos en selenio y donde la población se alimenta casi exclusivamente de alimentos cultivados localmente.

La deficiencia de selenio no se puede identificar claramente por los síntomas, ya que pueden deberse a varias causas. Por este motivo, las personas que sospechen un déficit de selenio deben someterse a un análisis de micronutrientes. Dado que el selenio se encuentra mayormente en las células sanguíneas y no en el plasma, lo ideal es realizar un análisis de sangre completa para evaluar de forma óptima el estado del selenio. Los valores óptimos oscilan entre concentraciones de 121 a 168 µg de selenio por litro de sangre completa. Lo ideal es que verificar el estado de selenio anualmente.

Las personas afectadas por la deficiencia de selenio deben recibir asesoramiento profesional. Aunque las nueces de Brasil se consideran extremadamente ricas en este micronutriente, su inmenso contenido en selenio y su posible exposición a la radiación y el moho aconsejan consumirlas con precaución y moderación, y no son adecuados como suplementación controlada.

Por lo tanto, la estrategia más prometedora para abordar una deficiencia de selenio es la suplementación específica con un preparado de selenio adecuado. Para asegurar el aumento de selenio con preparados en dosis altas, se deben realizar controles periódicos.

La deficiencia de selenio durante el embarazo no solo puede afectar a las hormonas tiroideas de la madre, sino también al desarrollo cognitivo del niño. Sin embargo, según la Sociedad Alemana de Nutrición (DGE), la demanda de selenio de las mujeres embarazadas no aumenta.

Una investigación científica demostró que el aporte materno de selenio durante el embarazo se asocia con el desarrollo psicomotor, el desarrollo del lenguaje, la comprensión y la impresión de los niños de 1,5 años de edad. Según los investigadores, un buen suministro de selenio durante el final del embarazo es crítico, ya que es cuando el cerebro experimenta un gran crecimiento y desarrollo.

El aporte de selenio a los niños durante la lactancia también depende de la madre. Las mujeres que amamantan durante un periodo de tiempo prolongado deben vigilar sus niveles de selenio, ya que tienen un mayor riesgo de desarrollar una deficiencia de este micronutriente. Durante la lactancia, la DGE señala un aumento de las necesidades.

Un buen suministro del selenio no solo es importante en la barriga, sino también en los siguientes años. La deficiencia de este oligoelemento puede alterar las hormonas tiroideas infantiles y, por lo tanto, el equilibrio hormonal del niño, además de aumentar su susceptibilidad a las infecciones. Los retrasos en el crecimiento y los trastornos de la formación ósea también pueden estar asociados a la deficiencia de selenio en niños. 

La menopausia es un desafío para muchas mujeres tanto a nivel físico como psicológico. Y la falta de selenio puede empeorarla.

Selenio y tiroides. Aumento de peso, cansancio, estado de ánimo bajo… Existen muchos paralelismos entre los síntomas de la enfermedad tiroidea y los de la menopausia. En consecuencia, los trastornos de la tiroides pueden resultar especialmente difíciles para las mujeres durante esta etapa.

El selenio es una importante sustancia protectora y funcional para la glándula tiroidea. Este oligoelemento protege la glándula endocrina frente a los daños oxidativos y está implicado en la transformación de la tiroxina tiroidea (T4) en triyodotironina (T3), que es mucho más eficaz. La deficiencia crónica de selenio puede provocar una insuficiencia tiroidea.

La enfermedad tiroidea autoinmune de Hashimoto, que afecta principalmente a mujeres, no está presumiblemente causada por el déficit de selenio, pero al menos se ve favorecida y agravada. La administración controlada de selenio se ha convertido en el tratamiento estándar para enfermos de Hashimoto y puede reducir los anticuerpos TPO.

Conclusión: Muchas regiones de Europa se caracterizan por suelos con bajo contenido en selenio. Dado que el contenido de selenio del suelo es esencial para el suministro de este oligoelemento a las plantas, los animales y las personas que viven en él, los habitantes de zonas con deficiencias de selenio deben vigilar sus niveles. Un análisis diagnóstico de sangre completa en laboratorio puede ayudar a identificar el déficit de selenio y, al mismo tiempo, proporcionar una base óptima para el determinar el tratamiento adecuado.