Salud dental

Una sonrisa radiante encarna la alegría de vivir. La base para ello: una dieta variada centrada en las vitaminas y los minerales, junto con un estilo de vida saludable y activo.

Un cuidado dental adecuado comienza con los más pequeños. Cepillarse los dientes al menos dos veces al día, usar hilo dental entre los dientes y enjuagues bucales debería ser tan natural como las visitas regulares al dentista. Sin embargo, no sólo es importante un cuidado dental externo para que nuestros dientes se mantengan firmes durante el mayor tiempo posible. La dieta diaria también tiene un efecto sobre las encías. Cuando las bacterias adheridas a los dientes metabolizan el azúcar y los hidratos de carbono, los ácidos metabólicos pueden dañar el esmalte. Para mantener unos dientes fuertes, un esmalte estable y unas encías saludables, es esencial un suministro suficiente de micronutrientes, es decir, minerales, vitaminas y oligoelementos.

Nutrición saludable: micronutrientes para los dientes y las encías

Para tener unos dientes fuertes y unas encías sanas, es necesario recibir un aporte suficiente de micronutrientes importantes. El calcio no sólo contribuye al mantenimiento normal de los huesos y de los dientes, sino que también interviene en el metabolismo energético normal. Junto con el magnesio y el potasio, el calcio contribuye al funcionamiento normal de los músculos y los nervios.

Estudios han demostrado una conexión entre las irritaciones del periodonto y una baja concentración de vitamina C en la sangre. Un buen aporte de vitamina C protege las células del estrés oxidativo y favorece el funcionamiento normal de las encías y de los dientes. La vitamina C también contribuye a la formación normal de colágeno, que es un componente del tejido de las encías.

Además de la vitamina C, las vitaminas A, D, K y E también desempeñan un papel fundamental en la salud dental. En particular, la importancia de la vitamina D, la llamada vitamina del sol, está cobrando cada vez más importancia, ya que no sólo ayuda al sistema inmunitario, sino que los dientes y los huesos se benefician de su efecto mineralizador. Además, sabe que la ingesta de ciertas vitaminas del grupo B, sobre todo el ácido fólico, influye en el estado de las encías. Las vitaminas antioxidantes como la vitamina E, y los minerales como el zinc y el selenio, pueden ayudar a proteger las células de las reacciones de estrés oxidativo.

Una dieta sana y equilibrada puede contribuir significativamente a mantener los dientes y las encías sanos. Por lo tanto, una suplementación específica con suficientes minerales puede ser útil para el mantenimiento de la salud dental.